Es un trastorno típico de los primeros meses de vida que se caracteriza por un llanto intenso sin causa aparente. Es importante realizar un buen diagnóstico diferencial ,es el pediatra quien suele hacer este diagnóstico.Esta afección esta relacionada con la madurez del sistema digestivo y suele desaparecer entorno a los 5 meses de vida. Con la fisioterapia podemos ayudar a que esta situación se normalice bastante antes, además de hacer este proceso más llevadero.
